Empecé “El prisma Violeta” con una serie de entrevistas de mujeres, algunas de ellas muy queridas para mí. A otras las conocí para la entrevista, pero entre nosotras se estrechó un vínculo muy bonito. Por todo ello doy las gracias a estas mujeres. Por ser tan especiales. Mi andadura me llevó luego a escribir una serie de relatos cortos, cada uno destinado a algún problema en concreto. Pienso que esa gente que tiene que soportar una enfermedad me parecen los verdaderos héroes. A ellos también les doy las gracias, y espero que si no he sido lo bastante científica perdonen mi ignorancia en la materia. Siempre he intentado documentarme lo máximo posible.
Llegados a este punto, quiero agradecer a los miembros de Pandora su paciencia y saber estar para conmigo, de todos es sabido que los adoro.
No tengo nada más que aportar a esta especie de despedida. Ojalá que les vaya bonito a todos los que seguían mis relatos. A los que no los seguían les deseo lo mismo. Hasta pronto queridos lectores y lectoras.